23:47 11/10/2008 - 2.11 13/8/2022. Noelplebeyo Os Cuenta.

 A las 23:47 del 11 de octubre del 2008 se inauguraba el Plebeyo. Me propuse 1000 entradas como límite para su existencia. Si no me equivoco esta es la 885. Al ritmo actual, apenas publico una o dos entradas al mes - en el mejor de los casos - me quedarían varios años para cumplir la expectativa. Creo que voy a incumplir mi propuesta. Pensaba en esta tarde pasada  que igual ahora - terminada una novela y sin atisbo de empezar ninguna nueva y con una serie de poemas totalmente olvidados en una carpeta en el escritorio - que podría incorporarme al Plebeyo y darle nuevas energías. Hay cosas que contar - siempre aunque no todas sean alegres - y mentiría si no reconozco que puedo dedicar algún rato - incluso una hora - a la lectura de otros blogs y a la actividad de rellenar una página en blanco.

Pero no va a ser . No. Recuerdo cada uno de estos años de múltiples maneras. Una es repasar al azar alguna de las entradas , releer comentarios y visitar a aquellos que lo hicieron. No sé si os ocurre pero es como un flash inmediato y recuerdas tal lectura, aquel comentario, aquella imagen e incluso alguna conversación. No voy a negar la importancia del Blog. Una puerta virtual que ha aportado mucha creatividad, momentos de complicidad y más de una sonrisa. He de decir que me gusta el formato, a pesar - ya comentado hasta la saciedad - que se ha visto superado por otras redes sociales. No hay nada ni malo o bueno en ello. Es una obviedad.

Hoy termino de manera oficial esta aventura. Es como desprenderse de algo tuyo, inherente hasta cierto punto a tu existencia pero que ya no genera entusiasmo. Y tampoco vamos a mantenerlo porque sí, o por un simple propósito o promesa. Creo que se merece un merecido descanso. He de reconocer que no sé muy bien lo de ocultar las entradas ¿ es necesario ? o directamente eliminarlo, por aquello de evitar arrepentimientos ¿ es grave acaso ? No lo sé. Veremos si mañana hago algo.

Las últimas palabras del Plebeyo son de agradecimiento a muchas personas que están y han pasado por aquí. La inmensa mayoría han sido amables en sus comentarios y algunos incluso ingeniosos y sorprendentes. También he disfrutado de leer obras ajenas. siempre te dejan algo, unos segundos o incluso te hacen reflexionar y corregir cosas que ni tan siquiera te habías planteado. Es por tanto una despedida, pero no triste, -  ¿ acaso deben ser siempre así? - sino más bien reconfortante por haber tomado una decisión que realmente llega tarde. Tan solo hay que ver la escasa actividad registrada últimamente. 

Les deseo todo lo mejor en sus vidas y en sus publicaciones - la parte visible de las mismas - 

Un saludo y sean buenos - o no -

Mochila Equal Escuela

Un viaje a Nueva York. Caluroso verano de 2008 y en un outlet cercano a Harlem aparece una mochila, que recuerda a un morral de los pastores, y de pronto se transforma por arte de magia en una mochila repleta de libros de texto, folios de trabajos y exámenes, un estuche con bolígrafos y lápices, una pequeña calculadora y tizas blancas ubicadas en cualquier bolsillo. Además las llaves y recientemente las mascarillas. 

Hoy no ha podido más. Con diversos agujeros en su tela, y la hebilla suelta, su correa ha dejado caer todo su peso al suelo.

Curiosamente es algo que te identifica. Al inmortalizar su imagen en Instagram algunos ex alumnos me han enviado un saludo. Nada de pésame. Buenos recuerdos. Ahora descansa en paz.

 

Mi Alisio

Bien pensado la vida es un suspiro

si bien  el suyo ha sido, es y será 

mi permanente alisio.

Almudena Grandes Y La Memoria Histórica

PUBLICADA EL 29/5/2018. 

Aquello empezó de manera casual. 

Una conferencia sobre las Sin Sombrero donde una compañera animó a unos alumnos a ir, justo antes que yo hacía lo mismo.

Continuó con una charla con un par de compañeros y la posibilidad de hacer un trabajo sobre la memoria de nuestros abuelos, un trabajo de recoger testimonios sobre la Guerra Civil y el Franquismo.

Lo siguiente fue acudir a una exposición organizada por la Asociación de la Memoria Histórica centrada en las imágenes de la Guerra civil en Cartagena.

Y el sábado , noche de los Museos, algunos alumnos se animaron a ir a ver los refugios de la Guerra Civil, ya ellos solos, según dijeron.

Y la culminación fue la llegada a Cartagena de Almudena Grandes para presentar una novela de su serie histórica Episodios de una Guerra Interminable, Los pacientes del Doctor García, y allí nos presentamos, unos pocos para oír la charla, para hacerla entrega de nuestro trabajo, y de paso, poder charlar unos pocos segundo con ella, mientras nos dedicaba unos cuantos libros. 

La casualidad ha propiciado un mes intenso donde los alumnos han vivido en primera persona un periodo tan importante de la historia de nuestro país. Hemos logrado, creo yo, que en ellos se despierte la curiosidad, el interés , la puerta directa al conocimiento. Más eficaz e ilustrativo que 10 sesiones en un aula y diversos epígrafes de un libro de texto.

Ha sido el colofón a un intenso trabajo con alumnos de 4º ESO, aquellos que en breve empezarán a ser ciudadanos activos de nuestra sociedad.

Y yo, mientras tanto, tan contento. Viendo en cierta medida a una de mis maestras literarias, mezclando en un instante el papel de profesor, lector y escritor. 

Lunes 21 de mayo. Almudena Grandes dedicando a un servidor

Testigo

 Recuerdo uno de los primeros, Óscar Carranza. Hablamos de 1994.  O sea, hace 27 años. Y si mis cuentas no me fallan ahora mismo tendrá 45 años. No es necesario que os suene el nombre y el apellido. De aquel listado de bachillerato, apenas recuerdo tres nombres y el suyo me es más familiar porque es igual que el mío. Fue un año de iniciación. Recuerdo todas las tardes preparando las clases del día siguiente, Historia de España, aún muy desconocida para un recién licenciado en Geografía y un interino sin experiencia. Renovaba el contrato cada quince días una sustitución y acabé impartiendo clases el curso entero. Desde aquel año, apenas uno o dos cursos he dejado de dar la Historia de España, convirtiéndose a la postre en mi asignatura favorita. Podéis imaginar que  la evolución ha sido vertiginosa. Pero lejos de esa imagen estereotipada del profesor con demasiadas vacaciones y fines de semana de regalo, puedo aseguraros que sigo preparando con mimo cada una de las clases. Es cierto que ya las tablas son sólidas pero el reto sigue siendo el mismo. Hacer cercana, atractiva e importante una materia a unos alumnos que - ahí es donde está la magia - siguen siendo similares a Óscar Carranza. Claro, las pintas y la época son diferentes. De hecho me encontraba a mis alumnos en los mismos bares - aquellos llenos de humo - escuchando a los Ramones o a Barricada. Teníamos una chupa de cuero y el pelo largo, incluso con coleta y vaqueros con una camisa sin marca conocida. Ahora - si me los cruzo suele ser por la calle - se quedan mirándome con cara de sorpresa porque ven al profesor con una bolsa del Mercadona e incluso con americana. Es el paso del tiempo. Últimamente recreo muchos momentos con alumnos y en la confusión de tantas generaciones empiezo a tener las sensaciones de estar viviendo una fase final ( a pesar que aún quedan muchos años para una jubilación, si es que esta llega ) donde no recuerdo nombres, mezclo promociones y seguro que miles de anécdotas quedan olvidadas en algún resquicio de la memoria. Y no es porque - toquemos madera - esté perdiendo la cabeza o nada parecido. Creo - simplemente - que el archivo de profesor ha ocupado significativamente la mayor parte de mi memoria . Y se enriquece a través de redes sociales, - sobre todo de los alumnos más recientes, que ya nacieron con el facebook , twitter o instagram en su ADN - que me permiten seguir en la distancia presente en sus vidas y viceversa. Ya he "asistido" a bodas, partos, viajes, trabajos y diferentes avatares acaecidos por cada uno de ellos. Desconozco si forma parte de mi nombramiento de funcionario, pero he de reconocer que es la " mejor paga  extra "que he recibido. 

Ser testigo de muchas vidas  que en la realidad pasaron fugazmente.

Entre Una Maraña De Vistosos Folios

 

En las excepcionales horas - donde

Reina el silencio y el tiempo viene

Marcado por la rápida redacción

Del bolígrafo azul y del blancor del tipex -

Caes en la cuenta que su angustia es tuya

 - Si bien de otro tipo no tan distinto -

Al igual que sus ilusiones son dos

gotas de agua más similares al

Océano que desborda la experiencia.

Son tal vez minutos tan trascendentes

Y significativos para un 

Colectivo que apenas sin darte

Cuenta formas parte de su historia

Entre una maraña de vistosos

Folios sobre los Austrias y Borbones.

50

 

Recuerdo aquel sábado de noviembre, aquella madrugada donde los termómetros no alcanzaban los cero grados. Un cala bobos que alternaba el agua fría con la escarcha helada, y que rociaba las aceras y los capós de los automóviles cuando aún estaban fabricados en hierro. Tuvo que ser una espera larga, prolongada a lo largo de tantas horas de sueño y que no culminó hasta que se anunciaba una fría mañana de nuevo. Difícilmente saldrá el sol. Típico fin de semana de un invierno adelantado. Así se las gasta Valladolid. La niebla persistente permanecerá todo el día, incluyendo la tarde y se prolongará hasta bien entrada la siguiente semana. Total, para lo que hay que ver. Pensaban muchos. No podía estar más en desacuerdo, años después.

Recuerdo las primeras semanas en aquella casa tan enana, la que sería mi casa, y las visitas de las nuevas vecinas asombradas por tanta novedad en el vecindario, y un pequeñajo que rondaba mi habitación sin atreverse a entrar. Siempre fue tímido y poco decidido. Diferencias abismales en tan corto espacio llaman siempre la atención.

El tiempo transcurrió al principio despacio. Se supone que cada nueva experiencia propiciaba que los segundos se alargaran y parecieran minutos, y los minutos a veces horas. Eran años que parecían marcianos en cuanto a su duración, y a veces uno pudiera sentirse habitante extraterrestre. La mayoría de las veces no. El balón en toda su diversidad, los partidos del estadio, las lecciones de maestros y los veranos del pueblo. Todo respondía al mismo patrón de cualquiera de los vecinos cercanos, a excepción de los del quinto ( que jamás existieron excepto en mi imaginación por no querer vivir en el último piso de un bloque de pisos mal terminado ; maldito constructor corrupto ).

El tiempo fugaz se fue aletargando cuando más difícil se hacía el camino. Pronto todo un  emprendedor. Negocios para tener dinero. Guitarras con cuerdas frustradas y canciones reivindicativas. Noches que se convierten en día y días que compaginas deportes con resacas, estudios con conquistas indefinidas y primeros viajes más allá del pueblo, entre riscos, partidas de mus y libertad vigilada. Cine y más cine.

Y llega el final. Renuncia del Derecho para acabar geógrafo torcido en Moscú y maestro directo a Al - Andalus junto a Hárrison Ford, ¿ dónde podría estar mejor ?. Surgieron y no pararon la letras.  A veces pienso que pudieran estar guardadas mejor.

A partir de ahí, ese frío día del mes de noviembre ya nunca jamás se ha producido. Han pasado 22 años. Y sin darnos cuenta, si sumamos todo, 50.

Recuperada La Conciencia

 

Acaso el tiempo, sin duda implacable,

Corre a favor del viento sin dejar

Hojarasca asentada desde el mismo

Suelo hasta la vertical más amable.

Dudas si acaso revives recuerdos

O el despiadado presente emborrona

Cualquier atisbo de sentirse quieto.

Y mientras los ávidos segundos

 Prescinden de obsequiar un solo recuerdo

El resto del día - recuperada 

la conciencia - se lamenta y se lamenta.

Tanto duele y se añora su ausencia.

El Partal

 

 

Me  encanta el Partal. Un palacio anodino, sin leones que llamen la atención; austero en su concepción y desde luego el que menos fotografías se lleva cuando visitas La Alhambra. Disfruto de ese mirador, levitando sobre el barranco y esa torre vigía cuyo artesonado maravilloso se encuentra en Berlín, en un museo que lo recibió con los brazos abiertos cuando aquel alemán que ocupaba el palacio ruinoso únicamente pidió llevarse algo a cambio de devolver la propiedad del palacio al estado español. Nada que objetar. El Patrimonio descuidado a lo largo de los siglos está a buen recaudo en un lugar que nunca supieron enriquecerse de la cultura islámica.

Tras la borrachera de sensaciones que proporciona el Mexuar, el Palacio de Comares y el Palacio de los Leones, los visitantes suelen pasar de largo este palacio que yo considero tan especial. Su alberca es fantástica; su oratorio es magnífico y la fachada con sus arcos angrelados, su paños de decoración son bellos, recordando a la Giralda de Sevilla ( buscar alguna foto y disfrutarlo ). Pero he ahí que pude fotografiar su exterior. Como este palacio rojo deja su impronta a la vista desde el Albaicín. Junto a esas casitas nazaríes que siempre están cerradas, y dudo yo que el gentío visitara si estuvieran abiertas.

Llevaba tiempo sin pasear por el monumento más bello de España y tuve la sensación de estar en casa. No iba con alumnos; incluso en un horario poco frecuente. Quiero recordar que un par de veces he visitado La Alhambra por la tarde. Serán más, pero ya no las recuerdo.

En definitiva sin saber que quiero contar si que puedo decir aquello que frecuentemente lo que no llama la atención, lo lejano a lo mediático tiene una personalidad que a veces apabulla. Este palacio es sobresaliente, sin necesidad de retoques. Aporta originalidad y esencia. Tiene cuerpo. Probablemente el instante imborrable de esta última visita. Al perderlo de vista la oscuridad se hizo en la ciudad palaciega y las luces artificiales proporcionaron otra manera de interpretar cada uno de los monumentos, y sin quitar un ápice de la belleza, el Partal se mantuvo tan colosal que no he descansado hasta escribir estas letras.

Te debo una próxima visita. Esperemos que más pronto esta vez.

Magnavox

 

La vida , a menudo, se reduce a cosas simples. Este pequeño electrodoméstico, un reloj despertador Magnavox, me ha acompañado prácticamente media vida. Desde que abandoné el lugar donde nací y empecé a recorrer multitud de lugares asociados a mi vida laboral y sentimental. Probablemente sea el objeto que ha estado más presente en el amanecer de todas las mañanas, y seguro que el último al que he mirado antes de descansar y dormir. Y no quisiera pensar si este objeto hablara, que podría decir. Ahí lo dejo.

Esta mañana no pude conectar la radio. Esta mañana no supe saber a que hora me despertaba. Simplemente unos trazos parpadeantes de luz roja  indicaban en un idioma indescifrable que su hora había llegado. Y he de reconocer que en ese instante pasaron por mi cabeza cuántos años ha estado servicial al alcance de mi mano izquierda. 

Vendrá otro. Por necesidad. Seguro que no será lo mismo.

Terminales. Promoción

El pasado 29 de mayo puede considerarse como la fecha final de Terminales. Desde el 28 de agosto de 2017 barrunto este proyecto, y como veis me lo he tomado con calma. Curiosamente el famoso confinamiento ha permitido que haya mantenido una rutina casi diaria, por las noches que es mi momento favorito para escribir, y ha acelerado la culminación de esta nueva novela. Ahora queda un verano para leer tranquilamente y retocar, corregir lo que sea necesario. Como la portada aún no está decidida, he distorsionado una propuesta, que, curiosamente, ha incluido las espirales y que se incorporarán seguramente en la definitiva.

Y no voy a adelantar aún la sinopsis, argumento o intención ( caso que exista ). Simplemente os dejo aquí los números que acumula la literatura ( si así puede decirse  ). Casi 70.000 palabras agrupadas en casi 700 párrafos. Curiosamente el número siete aparece en el último capítulo de manera destacada ( tomarlo como un avance ). En fin 126 páginas rebosantes de ilusión. Empieza la aventura. Dos escenarios. Uno de ellos, Barcelona.

333.333. Pasaron Por Aquí

El pasado Viernes 5 de junio

Pasaron por aquí. 333.333. Es curioso como las cifras se convierten en significativas por alguna razón. En este caso por su repetición. El 11 de octubre del año 2008 a las 23.47 el Plebeyo apareció por las redes. He aprovechado para hacer un repaso de quienes pasaron y pasan por aquí. Hay múltiples maneras de hacerlo. Repasando viejas entradas leyendo comentarios; pinchando el icono de los seguidores. De la mayoría, reconozco, recuerdo muy poco, apenas nada, y además si quieres visitar su blog, mayoritariamente han desaparecido. Unos pocos sí me traen recuerdos. Algunas entradas y sus reacciones quedan alojadas en algún rinconcito de la memoria y de pronto emergen de no se sabe donde para sentirlas frescas, como recién leídas en la pantalla. Algunas personas me intrigan y desde luego que me gustaría saber qué son de ellas. Si han seguido escribiendo en otras plataformas, o con lápiz y papel, o igual bajo otro aspecto y nombre. En este poderoso mundo virtual , quizá más presente desde ahora con/tras la pandemia, se concatenan experiencias que en el día a día igual pasan desapercibidas.

En fin, una breve reflexión que me ha venido a la cabeza en esta tediosa tarde de domingo, con temperaturas que anuncian próximo el verano, y el descanso tradicional en estas épocas. 

Esta es la entrada 837 y recuerdo en el acta fundacional del Plebeyo que el límite serían 1000.

Borrador Terminales

Pues Terminales toma forma.

Provisional. Desequilibrante. Locura.

Barcelona. Camboya.

20 capítulos finalizados.

Nunca definitivos pero básicamente definidos.

Virtuales

¡ Quien diría que aquello con lo que vienen amenazando , el mundo virtual, irrumpiría de manera violenta en la enseñanza !

No es que vaya a abrir el debate al respecto. Aspectos positivos y negativos por doquier y a gusto del consumidor, pero , eso sí, lo que tengo claro es que sin la presencia de ellos nada es posible.

Y que queréis que os diga. Pero sin el roce, todo es distinto.

Muchos héroes salen en las crisis. 

Igual ahora la sociedad percibe lo que significa trabajar en un aula con un montón de adolescentes y las tareas asociadas a ello. Pero no os preocupéis. Los que estamos ahí, día tras día, no buscamos más que estos momentos, aunque virtuales

Aquí tenéis más héroes. Mis niños

Clase virtual aprendiendo y disfrutando

Desfragmentando El Calendario

Nunca entendí que los encuentros casuales

Cambiaran de nombre los meses ,

Hablaran del año como un pareado,

Desfragmentar dulcemente el calendario

Para estar en la distancia consigo 

Mismo,

Conversando en silencio

Cercanos, Lejanos.

Muerto

Esos silencios son asesinatos
Tan lentos, tan lentos
Que uno termina por habituarse
Hasta sentirse simplemente muerto.

Quinto Church

De la red

40 años. Un aniversario de relumbre. Este grupo, de sobra conocido si visitas este blog, prácticamente ha vivido, o mejor dicho, he vivido en paralelo a su historia. Estos australianos de origen aparecieron una tarde y fue dichosa, para definitivamente quedarse. Han sido tan prolíficos como desconocidos, pero raro es el día que no entono alguna de sus canciones, me dejó influenciar por sus letras o simplemente espero noticias suyas. Seré un frikie de la Iglesia. He sido capaz de ir y venir por diferentes ciudades para escucharlos, e incluso tuve la osadía de rozar la parte baja de la espalda de Willson Piper para no dejar escapar un autógrafo de su último disco. 40 años y han montado una gira por toda Europa. En mayo andan por Bilbao, Galicia, Madrid, Valencia y Barcelona. Iré a uno de las ciudades españolas y el 13 de junio el cierre en Londres. Y por si fuera poco anuncian un disco nuevo a finales de año. 

Para tener ya bien entrado los 60, este grupo de estilo peculiar, de un sonido reconocible a pesar de una discografía tan variada y diferente, mantiene una envidiable actividad. Siempre he sentido que la vida tiene un ritmo propio. El mío es este. No encuentro razón lógica ni tan siquiera podría defender que es el mejor de su época. Pero es mi ritmo. Sin duda soy el quinto Church. 

Carrera Con El Diablo

Empezar el año con una alta dosis de realidad, desde la vivida y aceptada hasta la actual, donde las luces y sombras nos muestran sin tapujos a un ser humano que no oculta nada y que ha ido (de)construyéndose sin rehuir la mirada que siempre devuelve el espejo.

Luis Sánchez Martín ( Facebook )  l.sanchezmartin  ( Instagram ) consigue con Carrera con el Diablo que esa sonrisa que tan difícil se pinta sea franca, la que se obtiene al sentir la vida, esa que se inicia, continúa y acaba a ritmo de Rock and Roll.

Una recomendación para regalar ( se ), en cualquier momento, no hay que esperar a la noche de Reyes

Cuento De Navidad

Sueña ya el veinticinco

Con ser anónimo veintiséis

Y clausurar un viejo año

Cuando aún se resiente el esófago

De excesos conscientes y voluntarios.

Sueña a menudo el veinticinco

Con ser treinta y uno cerrando ciclo,

desbordando champagne y 12 uvas,

colofón de besos en la comisura

Del fin definitivo del año.

Sueña ya el veinticinco

Haciendo balance en sus últimos 

minutos:

Dentro de trescientos sesenta y cinco días

cumplirá un año más.

Que sea con la misma bondad, paz

Y anhelo que presenta este momento.

Y el treinta uno, imberbe y jovial,
aún puede en el calendario esperar.

Inmaculate Fools

Bella melancolía.

Una voz peculiar. Ideal para estos días.