¡ Qué lastima que no hayas sido un hijo,
Habrías llegado lejos !
Frase del padre de M. Mead ,
que evidentemente no la tenía en buena estima.
que evidentemente no la tenía en buena estima.
Margaret Mead, antropologa estadounidense. Mead era declaradamente bisexual: además de sus tres matrimonios
heterosexuales tuvo dos amantes lésbicas de larga duración. Además
practicaba el amor libre cuando le era posible.
Todos opinamos de la belleza, aunque sea subjetiva a los ojos, y a la manera que tengamos de mirar.
A mí Scarlett me parece tan bella como Marilyn, y sé que con estas palabras estoy condenado.
Observamos la foto de Scarlett y recurramos a un hombre de 76 años. W. Allen se refirió a ella de la siguiente manera: Simplemente lo tiene todo. La vida ha sido generosa con ella: Es hermosa, sexy, muy lista, divertida, maja, ocurrente y buena compañera de trabajo. Tiene amplitud; garra dramática y humor, cuando se requiere que sea divertida. Y ya sabemos de la vida afectiva de Allen, con varias musas actrices, incluyendo a la hijastra de 41 años que actualmente lo acompaña, y particularmente unido , entre película y película a un clarinete. ¿ Quien cuestiona la belleza de esta musa nortamericana y danesa, que podría ser fácilmente nieta o hija del propio Allen ?
Pero, ¿ que opinamos de las diferentes relaciones afectivas- sexuales?
Y sin embargo, ¿ No sería Mead y aquellos y aquellas que actúen de la misma manera quienes puedan pensar en lo limitado de los demás ante lo convencional y lo que teóricamente la naturaleza y la sociedad sitúo como correcto ?
Estamos convencidos de que al abolir el matrimonio religioso, civil y jurídico, restauramos la vida, la realidad y la moralidad del matrimonio natural basado exclusivamente sobre el respeto humano y la libertad de dos personas: un hombre y una mujer que se aman. Estamos convencidos de que al reconocer la libertad de ambos cónyuges a separarse cuando lo deseen, sin necesidad de pedir el permiso de nadie para ello - y al negar de la misma forma la necesidad de cualquier permiso para unirse en matrimonio, y rechazar en general la interferencia de cualquier autoridad en esta unión - los unimos más el uno al otro. Y estamos convencidos también, de que cuando ya no exista entre nosotros el poder coercitivo del Estado para forzar a los individuos, asociaciones, comunas, provincias y regiones a convivir en contra de su voluntad, habrá entre todos una unión mucho más estrecha, una unidad más viva, real y poderosa que la impuesta por el aplastante poder estatal.
Bakunin, eres mi anarquista favorito