Se resistía a la muerte
De tal manera,
Con tanta arrogancia
Y maestría,
Que, insolente,
Ante la maléfica calavera,
Y sin pestañeo alguno,
Dibujos de Escher |
Empezó a través de la mina de grafito
Y con pulso firme,
A dibujarse una nueva vida.
La cadavérica mortal
Le sirvió de modelo
A un nuevo rostro.