Es curioso
Las maneras de hacerse mayor son de lo más variadas.
A saber:
Cuando observas y te sorprendes que nadie de los presentes calza zapatos y todos llevan deportivos, cuando tú - a esa misma edad - te preocupabas en atarte bien los cordones y lucir brillantemente la piel de cuero negro de tus zapatos recién estrenados.
Al disfrutar cuando ves cómo redactan y redactan desprendiendo seguridad donde tú albergabas dudas y quizá mostrar la tentación de mirar en diagonal. Llama la atención su seguridad, su seguridad del conocimiento - aún imitado - pero seguro en todo él. ¿ Acaso sabemos todo en algún instante ? Si alguien puede, será alguno de ellos, me temo que yo no.
Y siempre las canas se manifiestan cuando en silencio te deleitas. Paseas entre las mesas, y lees frases, acaso palabras; intercambias fugaces miradas con los ojos de aquellos que te dejarán - en breve - de enseñar. Sigo aprendiendo. Todos los años son parecidos, puede sentirse lo mismo. Unos ojos despiertos que siguen abriéndose al mundo a la par que los míos se van cerrando al perder su mundo.
Me queda por tanto una nueva despedida. Otra pequeña grieta que grita y grita ante lo inevitable. Serán ellos - esperemos - los que sigan hablando cuando en junio mi boca ya calle, y espere impaciente recobrar en septiembre la palabra
Esa es la ventaja de trabajar con la juventud día a día. Algunos lo ven inconveniente.
ResponderEliminares un privilegio
Eliminarnada de evitar. Todo lo contrario
besos
Cuando se está entre jóvenes las grietas se aprecian mas pero tambien se aprende mejor. Un abrazo
ResponderEliminarson grietas de aprendizaje
Eliminarmaravillosas
besos
Tus palabras reflejan una auténtica vocación.¡Me alegro mucho, Oscar, por ellos y por vos!
ResponderEliminarAbrazote.
eso no lo pongo en duda
Eliminarbesos
Eres un poeta maravillosamente vocacional con lo que haces, y por cómo lo sientes…
ResponderEliminarBsoss enormes, y feliz finde, querido amigo.
si tú lo dices, será verdad
Eliminarbesos
Quien a pesar de las grietas sigue aprendiendo, demuestra ser una persona con humildad.
ResponderEliminarBesos, Profe.
un afortunado, en todo caso
Eliminarbesos
No lo podías haber expresado mejor... padezco casi de la misma grieta, y como siempre digo... ¿quién enseña a quién?
ResponderEliminarUn placer leerte, amigo Noe.
Mil besitos para tu tarde.
siempre es mutuo el aprendizaje
Eliminarel suyo, más mérito
besos
Ponte deportivas que están de moda!
ResponderEliminarApasionante dedicación la tuya.
Besitos
tengo, tengo !!!!
Eliminarpero me gustan los zapatos....
y así ellos ven variedad
besos
Estimado colega,los maestros tenemos (o hemos tenido en mi caso) la gran suerte de envejecer día a día entre jóvenes,lo que supone envejecer con conocimiento de causa pero rodeados por la alegría de vivir y siempre algo se nos pega.Es cierto,hay distancias y grietas cuando los miras,pero eso sería siempre más penoso lejos de ellos.Más tarde comprobarás -como yo ahora- que en cualquier momento,donde menos te lo esperes,aparecerá ante ti alguien que ya no conoces pero que mostrará hacia ti el mayor de los agradecimientos...y eso,créeme, compensa cualquier grieta pasada.
ResponderEliminarSaludos cordiales
las grietas no las veo desventaja...sino cicatrices que fortalecen
Eliminarsaludos
Por las pequeñas grietas se cuelan grandes luces.
ResponderEliminar; )
Besos.
tienes razón
Eliminarque iluminan la oscuridad
bien
besos
Envejecer es un lujo que no está al alcance de muchos y hacerlo rodeados de juventud es un doble privilegio que algunos trasforman en poesía
ResponderEliminarBesos
un anciano, verso a verso
Eliminarbesos
Vamos dejando marcas el ellos, ellos las dejan en nosotros.
ResponderEliminarFinal y principio, principio y final.
Besos
Un bucle que tiende a infinito
EliminarBesos
Siempre se aprende de los jóvenes.
ResponderEliminarUn abrazo.
Y que no falten!!!!!
EliminarBesos