Una vez estuve en una isla similar
Y pude experimentar:
El sabor a salitre del
Agua a lo largo de la tormenta;
El sentir la caricia de su remanso
al romper las olas en la playa;
El corretear tras los cangrejos
Y verlos desaparecer bajo la arena;
Los ruidos de la selva por la noche,
El olor del pescado recién asado,
Los Geckos más gigantes e imaginados
En la oscuridad más tenebrosa,
Además de saberse completamente aislado.
Fue allí, en esa isla similar a la que muestro,
Donde empecé a comprender
Que todo el agua salada que nos rodea
No es - ni mucho menos gratuita -
Sino que asegura de por vida
Nuestra distancia.
Un Gecko |
Una visión diferente, complementaria de Ko Rom Saloem ( Camboya )
Te voy a hacer una jugarreta...
ResponderEliminar"No he leido nada,estará bien, seguro."
Es tu comentario en mi lunes azul,ja,ja,ja
Pero yo sí que leo y te digo que es una visión majestuosa y comprensiva de lo finitos que somos, de la distancia insalvable entre hombre y naturaleza.
el comentario destilaba ironía después de leer...y la distancia es entre los hombres...la naturaleza de por sí, y si pudiera, se alejaría
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarSentirte aislado, único, pequeñito. La magia del mundo, con sus fronteras saladas, para que si osas cruzarlas puedas aderezar los pescados al punto.
ResponderEliminarUn beso
algunos muy besugos, por cierto
EliminarPues por como lo describes de inicio, apetece aislarse en ese lugar lejano.
ResponderEliminarpara siempre ?
EliminarUn sitio para perderse, que no?
ResponderEliminaro encontrarse
EliminarEsa misma sensación es la que tengo yo al ver el asfalto de mi barrio, en versión urbana claro.
ResponderEliminarSaludos Noel
si...es reproducible en prácticamente cualquier lugar
EliminarLa naturaleza... las sensaciones que nos transmite... y la poesía que las decribe...
ResponderEliminarUn abrazo.
inescrutables
Eliminardonde está esa maravilla!!!??? me voy ahora mismo a comprar un billete sólo de ida....
ResponderEliminarmar de thailandia...a escasas millas de shikaunoville
EliminarEste fue el origen de venir a tu casa: leer tus experiencias de los viajes que has realizado y continúas haciendo. No he ido a Camboya pero la imagen que transmites de este país es un verdadero paraíso.
ResponderEliminarun abrazo :)
la razón es buena
EliminarAsegura de por vida nuestra distancia y nuestra existencia... que lugar mágico!
ResponderEliminarUn placer pasar por tu sitio, te dejo un abrazo.
de manera eterna
EliminarPrecioso el animal de la foto , me encantó, y bueno la isla esa debe ser paradisiaca , seguro.
ResponderEliminarMe gustó tu post, muy simpático. Besos.
bueno, si te despiertas con él a dos centímetros...como que puedes pegar un brinco, como poco
ResponderEliminarEspléndidos lugares a los que accederé a través de fotos, de poemas ajenos, pero tengo una capacidad rara de vivir aun lo que no he vivido. Y lo disfruto.
ResponderEliminarGracias Sr. Gato por darme la oportunidad.
Esa cualidad te honra y te da mucha dicha. Me alegro por ello
EliminarEl agua salada nos separa de experiencias y aventuras tan lindas como la que nos cuentas, Noel, Pero me has hecho viajar en tus palabras. Y hasta el aroma del pescado asado pude disfrutar.
ResponderEliminarSaludos.
Verdad que estaba exquisito?
EliminarAgua salada, Mar u Océano,... Mar de Thailandia, Mediterráneo,... ¿qué más da?.
ResponderEliminarLo importante es que es... MAR. ¿No? ;)
Besos y un fuerte abrazo.
3/4 partes del planeta, no era así? Ciertamente lo importante es la existencia del mar, puente siempre que tiende a unir, y también nuestra capacidad de sorpresa. Hace unos días se habló de Mauritia, un continente prehistórico que se haya sumergido en el Índico, fíjate si esta isla son los pies que asoman para nosotros.
ResponderEliminarUn besazo
preciosa isla, telúricas sensaciones, evocadora distancia
ResponderEliminarcomo sancti petri?
EliminarEstoy convencida que más de uno no le importaría coger lo básico, y por básico entiendo algo de ropa y poco más y perderse en una isla como esa.
ResponderEliminarSin teléfonos, ni hipotecas,sin presión, sin angustias, sin crisis...
Total, no creo que se esté peor que aquí y ahora.
A mi desde luego no me importaría.
Vivir sin nada más que lo que te ofrezca la naturaleza. Aquí hay demasiadas distancias ya entre unos y otros.
Besitos mediterráneos.
Muy acertada la reflexión, pero la siguiente es....por qué no lo hacemos? Complejo el ser humano
ResponderEliminarLas distancias unas son insalvables y otras estan para salvarlas, aunque a veces no sepamos lo que nos espera a ese otro lado.
ResponderEliminarPreciosa foto del mar.
Besos.
Lunna.
La cuestión es fruzar
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