El Gato Sin Nombre

Hola; yo vivía en torno a unas ruinas arqueológicas de Cartagena, en torno al cerro del Molinete, donde se cree que estaba el foro romano de aquellas épocas pasadas - Carthago Nova - y salí al encuentro. Debo ser muy confiado, pues con tan solo 3 meses de edad, me planté delante y empecé a jugar con una bola de papel y curiosamente cuando ese gigante me acercó la mano, le permití que me arrascara el lomo, la cabecita y entre caricia y caricia, le eché una mirada y un par de maullidos. De pronto, me vi dando un largo paseo, vi a otro gigante que me echó un líquido que olía fatal, me dió una pastilla que sabía peor, y tras un par de horas que se me hicieron eternas, llegué a un lugar cerradito, calentito, donde había comida, agua, arena, todo juntito, además de un cojín donde tumbarme y una manta donde acurrucarme. Aún estoy adaptándome, pero creo que estoy aquí mucho mejor, aunque el gigante a veces se acerca y me dices cosas muy raras...pero ya no me asusto. Por ahora, creo que me llaman Fermín, pero a los dos minutos prueban llamarme con otros nombres. Están un poco líados. ¿ Qué opináis ?... porque yo, necesito urgentemente un nombre.